#RECRUITERS. En el marco del Recruiters Forum, Lucía Muñoz Valecka, Gerente Senior de Capital Humano en Deloitte participó brindando la conferencia: “Preparando los líderes para múltiples futuros dinámicos”.
Muñoz presentó los desafíos del liderazgo en la industria 4.0 y la necesidad de pensar, actuar y reaccionar de manera diferente para hacer frente a las nuevas realidades que se están configurando.
“Los líderes ya no pueden confiar únicamente en su experiencia y esquemas de pensamiento previos, el mundo que los rodea está cambiando a un ritmo sin precedentes, necesitamos pensar de manera más amplia e innovadora para conceptualizar las posibilidades futuras”.
No se trata únicamente de aceptar la disrupción, se trata de generarla, de ver el mundo a través de un filtro disruptivo, y conceptualizar posibilidades donde otros no las ven; ser capaz de manejar y disfrutar la complejidad cognitiva que día a día cambia, “patear el tablero” a la hora de pensar posibilidades y, lo más difícil quizás, ser capaz de vivir en la incertidumbre, tomar decisiones al tiempo que nos requiere el nuevo mundo, decisiones rápidas y sin toda la información.
Tal lo planteó Muñoz, si bien la primera gran fuente de cambio es transformar la manera en la que pensamos, “cambiar nuestra forma de actuar claramente requerirá de entrenamiento y convicción”. En este sentido, será vital la construcción de una cultura de compromiso y colaboración, donde los líderes faciliten continuamente la conexión entre los diversos actores, promoviendo el aporte y contribución a través de áreas, equipos e incluso fuera de la organización. “Lo más importante será generar ese propósito, e invertir grandes niveles de energía en hacer las cosas bien: permitiendo intentar, fallar y volver a intentar constantemente”.
Por último, Lucía señaló que más allá del cambio consciente en el comportamiento y el esfuerzo implacable por pensar distinto, el líder del futuro deberá transformarse emocionalmente para así estar en posición de reaccionar de forma distinta. Riesgo y ambigüedad serán moneda corriente y la capacidad de resiliencia, de afrontar y desafiar la manera en la que se hacen las cosas pasarán a ser las capacidades clave del liderazgo.
“Al final del día, desarrollar la capacidad para prever y anticipar el futuro de una manera diferente en múltiples horizontes y tener confianza al tomar la iniciativa para conducir el cambio y generar la misma capacidad en los respectivos equipos de trabajo será la clave. La gran pregunta que surge es si las organizaciones están preparadas para cultivar y desarrollar líderes para el futuro que ya está aquí”, concluyó Muñoz.
Una vez finalizada la exposición, los participantes tuvieron la posibilidad de sumarse al “open space”, una instancia de conversación abierta, guiada por las preguntas y los temas de interés planteados por los propios participantes. Los profesionales de gestión humana de diversas organizaciones, plantearon sus inquietudes al respecto y en el rol de la organización para ayudar a sus líderes en su desarrollo. Ante las interrogantes planteadas, Muñoz dio algunos tips para comenzar a “refrescar” su modelo de liderazgo desde dentro. Establecer un nuevo contexto para sus líderes, identificar nuevas competencias de liderazgo y construir la cultura adecuada, son componentes vitales de una estrategia de liderazgo efectiva en el contexto actual.
La mayoría de las organizaciones deberán explorar nuevos enfoques e invertir más en desarrollar a los potenciales líderes con los que cuentan. En el ágil entorno actual, las personas aprenden haciendo e intentando. Para cultivar las competencias de liderazgo requeridas, las organizaciones pueden brindar a las personas tareas de desarrollo más diversas; promoverlas tanto al inicio como avanzadas sus carreras; brindar a los líderes con menos experiencia tradicional la oportunidad de dirigir proyectos e iniciativas; así como premiar las habilidades de los trabajadores y los líderes en todos los niveles, desde el principio y hasta el final de sus carreras, para repensar, desafiar y desarrollar la organización de la que son parte.
#RECRUITERS. En el marco del Recruiters Forum, Lucía Muñoz Valecka, Gerente Senior de Capital Humano en Deloitte participó brindando la conferencia: “Preparando los líderes para múltiples futuros dinámicos”.
Muñoz presentó los desafíos del liderazgo en la industria 4.0 y la necesidad de pensar, actuar y reaccionar de manera diferente para hacer frente a las nuevas realidades que se están configurando.
“Los líderes ya no pueden confiar únicamente en su experiencia y esquemas de pensamiento previos, el mundo que los rodea está cambiando a un ritmo sin precedentes, necesitamos pensar de manera más amplia e innovadora para conceptualizar las posibilidades futuras”.
No se trata únicamente de aceptar la disrupción, se trata de generarla, de ver el mundo a través de un filtro disruptivo, y conceptualizar posibilidades donde otros no las ven; ser capaz de manejar y disfrutar la complejidad cognitiva que día a día cambia, “patear el tablero” a la hora de pensar posibilidades y, lo más difícil quizás, ser capaz de vivir en la incertidumbre, tomar decisiones al tiempo que nos requiere el nuevo mundo, decisiones rápidas y sin toda la información.
Tal lo planteó Muñoz, si bien la primera gran fuente de cambio es transformar la manera en la que pensamos, “cambiar nuestra forma de actuar claramente requerirá de entrenamiento y convicción”. En este sentido, será vital la construcción de una cultura de compromiso y colaboración, donde los líderes faciliten continuamente la conexión entre los diversos actores, promoviendo el aporte y contribución a través de áreas, equipos e incluso fuera de la organización. “Lo más importante será generar ese propósito, e invertir grandes niveles de energía en hacer las cosas bien: permitiendo intentar, fallar y volver a intentar constantemente”.
Por último, Lucía señaló que más allá del cambio consciente en el comportamiento y el esfuerzo implacable por pensar distinto, el líder del futuro deberá transformarse emocionalmente para así estar en posición de reaccionar de forma distinta. Riesgo y ambigüedad serán moneda corriente y la capacidad de resiliencia, de afrontar y desafiar la manera en la que se hacen las cosas pasarán a ser las capacidades clave del liderazgo.
“Al final del día, desarrollar la capacidad para prever y anticipar el futuro de una manera diferente en múltiples horizontes y tener confianza al tomar la iniciativa para conducir el cambio y generar la misma capacidad en los respectivos equipos de trabajo será la clave. La gran pregunta que surge es si las organizaciones están preparadas para cultivar y desarrollar líderes para el futuro que ya está aquí”, concluyó Muñoz.
Una vez finalizada la exposición, los participantes tuvieron la posibilidad de sumarse al “open space”, una instancia de conversación abierta, guiada por las preguntas y los temas de interés planteados por los propios participantes. Los profesionales de gestión humana de diversas organizaciones, plantearon sus inquietudes al respecto y en el rol de la organización para ayudar a sus líderes en su desarrollo. Ante las interrogantes planteadas, Muñoz dio algunos tips para comenzar a “refrescar” su modelo de liderazgo desde dentro. Establecer un nuevo contexto para sus líderes, identificar nuevas competencias de liderazgo y construir la cultura adecuada, son componentes vitales de una estrategia de liderazgo efectiva en el contexto actual.
La mayoría de las organizaciones deberán explorar nuevos enfoques e invertir más en desarrollar a los potenciales líderes con los que cuentan. En el ágil entorno actual, las personas aprenden haciendo e intentando. Para cultivar las competencias de liderazgo requeridas, las organizaciones pueden brindar a las personas tareas de desarrollo más diversas; promoverlas tanto al inicio como avanzadas sus carreras; brindar a los líderes con menos experiencia tradicional la oportunidad de dirigir proyectos e iniciativas; así como premiar las habilidades de los trabajadores y los líderes en todos los niveles, desde el principio y hasta el final de sus carreras, para repensar, desafiar y desarrollar la organización de la que son parte.